Urochordata
Los tunicados (ardillas de mar o Urochordata) son un subfilo de los cordados.
Son filtradores marinos: viven principalmente del plancton. Se llaman tunicados porque la forma adulta está cubierta por una túnica coriácea. Esta túnica sostiene y protege al animal. Los adultos son sésiles, pegados a las rocas.
Muchos tunicados son coloniales o semicoloniales en su fase adulta. Se trata de un grupo bastante amplio, que contiene unas 3.000 especies. Los adultos viven sobre todo en el fondo marino, en la zona litoral.
Tunicados de la campanilla
Colonias del tunicado Botrylloides violaceus. Obsérvense los nuevos brotes de zooides dentro de las colonias y a lo largo de los márgenes de las mismas.
Colonia de Botryllus.
Alimentación
El chorro de mar tiene dos aberturas en su pequeño cuerpo. Una de ellas, llamada sifón oral, aspira el agua hacia el interior del animal; la otra, llamada sifón auricular, expulsa el agua fuera del animal. En su interior hay un pequeño tamiz en forma de cesta que atrapa el alimento: así que estas ardillas de mar son filtradoras. El chorro de mar puede cerrar los agujeros de sus sifones, como un cordón puede cerrar la abertura de una bolsa.
Ciclo de vida
Cuando está en estado larvario, se parece a un renacuajo y a veces se le llama larva de renacuajo. Al igual que muchas criaturas marinas, la larva de una ardilla de mar tiene un aspecto muy diferente al de una ardilla de mar adulta. La larva nada durante un corto periodo de tiempo y luego se adhiere a algo del fondo marino, como una roca, transformándose en su forma adulta. Suele permanecer en un lugar durante el resto de su vida.
Relaciones
Los tunicados están más emparentados con los craneados (mixinos, lampreas, vertebrados con mandíbula) que con los lanceolados, equinodermos, hemicordados u otros invertebrados.
Descubrimientos
En algunas especies se han encontrado sustancias químicas que podrían ayudar a combatir enfermedades como el cáncer o diversos virus.
Los científicos también han descubierto que algunas especies pueden curar algunos daños que se les producen, a lo largo de varias generaciones. Un proceso similar podría ser posible para los humanos.
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