Ciclo estral: qué es, fases, hormonas y función en mamíferos
Descubre el ciclo estral en mamíferos: fases, hormonas, función y su papel en la reproducción desde la pubertad hasta el embarazo.
El ciclo estral es el sistema reproductivo de la mayoría de los mamíferos.
Las hormonas reproductivas hacen que los ciclos comiencen después de la pubertad en las hembras sexualmente maduras. Se interrumpen por fases no reproductivas o por embarazos. Por lo general, los ciclos estrales continúan hasta la muerte.
Qué es y en qué se diferencia del ciclo menstrual
El ciclo estral es la secuencia de cambios hormonales, ováricos y conductuales que prepara al organismo de la hembra para la reproducción. A diferencia del ciclo menstrual humano, en el ciclo estral la hembra es receptiva sexualmente solo durante una fase concreta (el estro o "celo"), y no hay una hemorragia menstrual visible cuando no ocurre la gestación; en su lugar, el tejido uterino se reabsorbe en muchas especies.
Fases del ciclo estral
- Proestro: desarrollo folicular, aumento de estrógenos. Aparecen cambios físicos (hinchazón vulvar, aumento del flujo vaginal en algunas especies) y conductuales (atracción hacia machos) pero la hembra aún puede no ser receptiva.
- Estro (celo): fase de máxima receptividad sexual. Los niveles de estrógenos están altos; en muchas especies un pico de LH provoca la ovulación. Los signos conductuales (vocalización, inmovilidad o lordosis, búsqueda del macho) son típicos.
- Metaestro: periodo transitorio tras el estro; comienza la formación del cuerpo lúteo (cuerpo lúteo produce progesterona).
- Diestro (diestrus): fase luteal con elevada progesterona; el útero se prepara para la implantación y la gestación. Si no hay preñez, al final de esta fase se produce la regresión del cuerpo lúteo.
- Anestro: fase de inactividad sexual en la que el ciclo no se expresa o se detiene temporalmente (por ejemplo, fuera de la estación reproductiva o durante la lactancia).
Hormonas principales y su función
- GnRH (gonadotropina liberadora): desde el hipotálamo estimula la hipófisis para liberar LH y FSH.
- FSH (hormona foliculoestimulante): promueve el crecimiento de los folículos ováricos.
- LH (hormona luteinizante): desencadena la ovulación y favorece la formación del cuerpo lúteo.
- Estrógenos: producidos por folículos; provocan cambios sexuales secundarios y comportamiento de estro, además de preparar el tracto reproductor.
- Progesterona: secretada por el cuerpo lúteo; estabiliza el endometrio y crea un ambiente favorable para la gestación. También modula el comportamiento materno.
- Prolactina y oxitocina: intervienen en la lactancia y en el comportamiento maternal, y en algunos casos influyen sobre la función ovárica.
Variaciones entre especies
- Poliestrales continuas: (vacas, cerdos) presentan ciclos repetidos a lo largo del año.
- Poliestrales estacionales: (ovejas, cabras, caballos) reproducen en una estación concreta —las ovejas son típicamente receptoras de días cortos (otoño/invierno), el caballo de días largos (primavera/verano).
- Monoestrales: (lobos, zorros) solo tienen una o dos temporadas reproductivas al año.
- Ovulación inducida: en especies como los felinos, conejos o camelinos, la ovulación se desencadena por el coito en lugar de por un pico espontáneo de LH.
- Duración y signos del ciclo varían mucho: el estro puede durar desde unas horas hasta varios días según la especie.
Signos y diagnóstico
- Observación de comportamiento (aceptación del macho, vocalización, inquietud).
- Signos físicos (hinchazón vulvar, descarga, marcaje).
- Detección hormonal (medición de progesterona/estrógenos en sangre) o ecografía para evaluar folículos y cuerpo lúteo.
- En medicina veterinaria se utilizan pruebas y registros para sincronizar cubriciones o inseminaciones.
Función biológica y aplicabilidad
El ciclo estral coordina la producción de óvulos, la preparación del útero para la implantación y la conducta reproductiva para maximizar las posibilidades de éxito reproductivo. Desde un punto de vista aplicado, conocer el ciclo estral es esencial en manejo ganadero (inseminación artificial, sincronización con prostaglandinas), en conservación de especies y en el diagnóstico y tratamiento de problemas reproductivos.
Alteraciones y consideraciones clínicas
- Anestro: ausencia de ciclos por problemas nutricionales, estrés, lactancia, o factores endocrinos.
- Estro silencioso: ovulación sin signos conductuales evidentes.
- Quistes ováricos: pueden alterar la ovulación y el comportamiento estral.
- Tratamientos incluyen terapia hormonal, manejo nutricional y corrección de factores ambientales o sociales.
En resumen, el ciclo estral es un proceso hormonal complejo y adaptable que varía según la especie y el entorno, y que cumple la función de sincronizar la fertilidad con condiciones favorables para la supervivencia de la descendencia.
Diferencias con el ciclo menstrual
Los mamíferos comparten el mismo sistema reproductivo, incluido el sistema hipotalámico regulador que libera la hormona liberadora de gonadotropina en pulsos, la hipófisis que segrega la hormona estimulante del folículo y la hormona luteinizante, y el propio ovario libera hormonas sexuales como los estrógenos y la progesterona.
Sin embargo, las especies varían en los detalles. Una diferencia es que los animales que tienen ciclos estrales reabsorben el endometrio si no se produce la concepción durante ese ciclo. Los animales que tienen ciclos menstruales se desprenden del endometrio a través de la menstruación.
Otra diferencia es la actividad sexual. En las especies con ciclos estrales, las hembras suelen ser sexualmente activas sólo durante la fase de celo de su ciclo. Esto se conoce como "estar en celo".
En cambio, las hembras de especies con ciclos menstruales pueden ser sexualmente activas en cualquier momento de su ciclo, incluso cuando no están a punto de ovular. Los humanos y algunos otros primates, no tienen ningún signo externo obvio para señalar cuándo se produce la ovulación (ovulación oculta). Investigaciones recientes sugieren que las mujeres tienden a tener más pensamientos sexuales y son más propensas a la actividad sexual justo antes de la ovulación (celo). Sin embargo, no es nada tan evidente como el frenesí que muestran otros mamíferos durante el "celo".
Buscar dentro de la enciclopedia