Brownfields (terrenos industriales abandonados): qué son y cómo reutilizarlos

Descubre qué son los brownfields, cómo limpiar y reutilizar terrenos industriales abandonados para regeneración urbana sostenible, mitigación de contaminación y oportunidades de desarrollo.

Autor: Leandro Alegsa

Los terrenos baldíos (en inglés, "brownfields") son terrenos industriales, comerciales o empresariales abandonados o infrautilizados que están disponibles para su reutilización. La recuperación o ampliación de estas áreas puede verse limitada por contaminaciones ambientales reales o percibidas, por la incertidumbre sobre la titularidad, y por costes y responsabilidades legales asociados.

Qué son exactamente

En el lenguaje urbanístico de Estados Unidos, un terreno baldío (o simplemente un brownfield) es un terreno que fue utilizado anteriormente para fines industriales o comerciales. Estos suelos pueden contener pequeñas o moderadas cantidades de residuos peligrosos o estar afectados por algún tipo de contaminación que, tras una evaluación y, si es necesario, una limpieza, permita su reutilización segura. Los sitios muy contaminados con altos niveles de residuos peligrosos o polución —como los incluidos en programas especiales de remediación— suelen clasificarse por separado y no siempre se consideran brownfields.

Los terrenos industriales abandonados son, además, propiedades cuyos propietarios no han realizado la transferencia o gestión productiva, ya sea por costes de remediación, problemas legales o ausencia de demanda.

En países como el Reino Unido y Australia, el término se emplea de forma más amplia para referirse a terrenos previamente urbanizados o utilizados que quedan disponibles para nuevos usos.

Riesgos y problemas habituales

  • Contaminación del suelo, aguas subterráneas o superficiales (hidrocarburos, metales pesados, solventes, etc.).
  • Emisión de vapores (riesgo de intrusión de vapores a edificaciones cercanas).
  • Estructuras deterioradas, restos de fundaciones o infraestructuras obsoletas.
  • Incertidumbre sobre titularidad y pasivos legales: quién asume los costes de limpieza.
  • Impacto visual y social: depreciación de inmuebles cercanos y abandono.

Evaluación y remediación

El proceso típico para transformar un terreno baldío incluye:

  • Due diligence ambiental (evaluación preliminar, Fase I) para revisar antecedentes, usos previos y riesgos potenciales.
  • Investigación técnica (Fase II) con muestreos de suelo, agua y vapores para confirmar la presencia y extensión de la contaminación.
  • Valoración de riesgos para salud humana y el medio ambiente y definición de objetivos de remediación.
  • Selección de técnicas de limpieza adecuadas: excavación y retirada de suelos, estabilización/sellado (capping), in situ (bioremediación, biorremediación, fitorremediación), oxidación química, extracción de vapores, tratamiento de aguas subterráneas, o combinación de medidas.
  • Monitoreo posterior para asegurar eficacia y cumplimiento de normas.

Opciones de reutilización

Una vez evaluado y, si procede, remediado, un terreno baldío puede transformarse en:

  • Vivienda asequible o mixta (residencial + comercio).
  • Espacios públicos: parques, plazas, corredores verdes.
  • Áreas comerciales, oficinas o centros logísticos.
  • Proyectos industriales limpios o de economía circular.
  • Instalaciones de energía renovable (placas solares, parques urbanos) o huertos urbanos.
  • Proyectos culturales y comunitarios (centros cívicos, mercados, equipamientos deportivos).

Beneficios de la regeneración de terrenos baldíos

  • Reduce la expansión urbana sobre suelos no urbanizados (evita el consumo de nuevos terrenos o "greenfield").
  • Revitaliza barrios degradados, genera empleo y aumenta la actividad económica local.
  • Mejora la calidad ambiental y la salud pública tras la remediación.
  • Aprovecha infraestructuras existentes (redes, accesos) y puede integrarse en estrategias de movilidad y densificación sostenible.

Barreras y responsabilidades

Entre los principales obstáculos están los costes elevados de investigación y limpieza, la incertidumbre sobre responsabilidades legales, la falta de financiación y la posible desconfianza de la comunidad. Es clave definir marcos legales claros sobre responsabilidad y provisión de incentivos (subvenciones, exenciones fiscales, seguros de responsabilidad ambiental) para atraer inversores.

Políticas y ejemplos

En Estados Unidos existe desde hace décadas un marco para tratar sitios contaminados a través de programas federales y estatales; los casos más graves a menudo se gestionan con instrumentos especiales como el "Superfund". En el Reino Unido y en Australia las políticas públicas también fomentan la regeneración de terrenos previamente utilizados mediante planes de planificación local, financiamiento público y acuerdos público-privados.

Buenas prácticas para proyectos exitosos

  • Realizar evaluaciones ambientales rigurosas antes de decidir el uso final.
  • Involucrar a la comunidad desde el inicio para incorporar necesidades y generar confianza.
  • Combinar objetivos de sostenibilidad (eficiencia energética, manejo de aguas, biodiversidad) con la planificación urbanística.
  • Buscar mecanismos de financiación mixtos: fondos públicos, incentivos fiscales, inversión privada y alianzas.
  • Planificar medidas de seguimiento y gestión a largo plazo para garantizar la seguridad ambiental.

La transformación de terrenos baldíos es una oportunidad para armonizar desarrollo urbano, protección ambiental y revitalización social. Con marcos regulatorios claros, soluciones técnicas adecuadas y participación pública, muchos de estos espacios pueden convertirse en activos valiosos para las ciudades y sus habitantes.

Ejemplo de terreno baldío en una fábrica de gas en desuso después de la excavación, con la contaminación del suelo de los tanques de almacenamiento subterráneos retirados.Zoom
Ejemplo de terreno baldío en una fábrica de gas en desuso después de la excavación, con la contaminación del suelo de los tanques de almacenamiento subterráneos retirados.

Preguntas y respuestas

P: ¿Qué son los terrenos baldíos?


R: Los terrenos baldíos son lugares industriales y comerciales abandonados o poco utilizados que están disponibles para su reutilización.

P: ¿Por qué es difícil la expansión o la reurbanización de los terrenos industriales abandonados?


R: La ampliación o reurbanización de los terrenos industriales abandonados puede resultar difícil debido a contaminaciones medioambientales reales o posibles.

P: ¿Qué es un terreno baldío en la planificación urbanística de Estados Unidos?


R: En el lenguaje urbanístico de Estados Unidos, un terreno baldío (o simplemente un terreno baldío) es un terreno utilizado anteriormente con fines industriales o para determinados usos empresariales.

P: ¿Qué tipo de contaminación se encuentra en los terrenos baldíos?


R: Los terrenos industriales abandonados pueden estar contaminados por pequeñas cantidades de residuos peligrosos o contaminación.

P: ¿Puede clasificarse un terreno del Superfondo como terreno baldío?


R: No, los terrenos que están más gravemente contaminados y tienen altos niveles de residuos peligrosos o contaminación, como un terreno del Superfondo, no entran en la clasificación de terreno baldío.

P: ¿Qué son los terrenos industriales abandonados?


R: Los terrenos industriales abandonados son propiedades cuyos propietarios no están dispuestos a transferirlas o darles un uso productivo.

P: ¿En el Reino Unido y Australia, el término terreno baldío sólo se aplica a los terrenos utilizados anteriormente?


R: En el Reino Unido y Australia, el término se aplica de forma más general a los terrenos previamente utilizados.


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